Rompiendole el culo a la sirvienta
La mujer que ayuda a mi esposa en la casa es una persona muy servicial y que suele no pedir más que permisos de faltar de vez en cuando o un aumento de salario, y dado que hace muy bien su trabajo, solemos tratarla muy bien. Pero en una ocasión, cuando mi tío el del norte nos visitó, tuvimos de súbito que salir y ambos se quedaron solos, ella no sabía quién era él, pero él sí sabía quién era ella, y el muy desconsiderado aprovechó que ella estaba limpiando un cuarto cuando sin previo aviso la desnudó y comenzó a fornicarla, le acarició la concha y se la cogió de perrito, abriendo su coño y metiéndole su enorme polla, la pobre no sabía ni quién era pero con el cariño de siempre se dejó fornicar, luego él se la sacó de la concha, escurriendo jugos de panocha y suyos también, y sin decir agua va se la metió por el ano, la pobre lloró y gritó, él se excitaba cada vez más y comenzó a taladrar su culo con su vergota tiesa como pata de palo de pirata, le amplió el culo y se lo dejó todo petado, ella quedó con el culo como una margarita, oscuro el centro y rodeada de color, le llenó el culito con semen y durante días ella no pudo caminar derecho…